Nigromantes, astrónomos, humanistas, filósofos y matemáticos; generaciones de ellos observando el cielo y la Tierra, las analogías, los comportamientos, estudiando y cotejando. Una arcaica sociología que atravesaría los siglos para elaborar unos patrones universales y atemporales reflejado en los doce animales del horóscopo chino. Esa forma de ver el mundo e intentar ordenarlo me parece menos grosera y mancillada que el horóscopo “occidental”. Obsérvese, como prueba, la curiosa aparición a finales del año pasado (2008 fue el de la Rata) del gran roedor que desde el corazón del sistema en Wall Street ha roído hasta el borde del siniestro los cimientos del capitalismo. Ésta es la rata más gorda, pero no la única. Millones de ellas están incrustadas en las grandes vías del flujo monetario global y han medrado (y medran) desmedidamente con malas prácticas. Era efectivamente año de ratas.
Comienza el año del buey. Las características del animal lo reflejan como símbolo de la calma, el trabajo duro y la tenacidad. No son malos elementos para sobrellevar el ciclo económico y social que hemos de atravesar.
Feliz año, queridos caminantes.
-S.P.
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3 comentarios:
Acertado comentario Jardinero, con ratas de por medio que, haberlas, hubo y ojalá se extinguiesen. Lo que es la casualidad: mi año laboral 2009, ha comenzado justamente hoy 26 de enero, a la vez que el del buey. Asi pues, deseémonos calma, trabajo duro y tenacidad. Feliz año tambíén para tí. Besos silenciosos y un cariño a Tillo.
Gracias jardinero, igualmente.
Espero que estés bien y tillo también.
Yo por fin vuelvo a tu jardín, hace tiempo que no lo visito, ya te contaré la causa, y está tan bello como siempre.
Un abrazo
Esther
Gracias por los comentarios.
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