Todos
anhelamos el éxito. No sólo el éxito del dinero, del prestigio o del poder,
también puede ser el simple éxito de hacer que las cosas funcionen. Si tienes
una afición como la jardinería, te encanta ver que tus flores responden a tus
cuidados. Si estás en el colegio, quieres dominar tus materias. Si eres un
científico, buscas obtener resultados con tus experimentos. Todos queremos tener
éxito.
Pero
una vez que das con algo que funciona, ya sea dentro o fuera de ti, requiere
mucho coraje el seguir avanzando más allá de tus límites. No rendirse.
La
espiritualidad es creatividad. Sólo con creatividad puedes tener el poder de
seguir el Tao. Sólo con creatividad puedes reformar tu personalidad para que
sea un vehículo espiritual. Sólo con una gran amplitud de variaciones puedes
seguir el constantemente cambiante Tao. Por lo tanto, cuando sigas el Tao, no
te aferres a los métodos y al dogma. Se espontáneo.
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