La actitud
cariñosa y la seducción amorosa de muchas madres, recursos defensivos frente a
la secreta inseguridad y a la dependencia afectiva encubierta por una aparente
entrega, suelen atrapar a los hijos en vínculos muy poderosos y difíciles de
romper, incluso rebelándose contra ellos.
A menudo es
más difícil para los hijos varones, que se enredan en una compleja relación
edípica, que va a marcar sus dificultades amorosas posteriores.
-Carmen
Durán / “Amor y dolor en la pareja”. Ed. Kairós
(En la imagen "Edipo y la Esfinge" de Giorgio de Chirico)
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