“La
relajación física ha de continuarse en una relajación psíquico espiritual con
el fin, no sólo de agilizar, sino de liberar el espíritu. Ha de ser ágil para
alcanzar la libertad y libre para recuperar la agilidad primaria. Y esa
agilidad primaria difiere esencialmente de todo lo que suele comprenderse comúnmente
por agilidad mental. Así se encuentra, entre los estados de relajación física
por una parte, y libertad espiritual por la otra, una diferencia de nivel que ya
no puede salvarse solamente por la respiración sino tan sólo por un
liberarse a sí mismo de todas las ligaduras, sean cuales fueren, por la pérdida
total del yo, de suerte que el alma, sumergida en sí misma, se halle en el
pleno poder de su innombrable origen”.
-El
maestro de Kyudo Awa, citado por Herrigel
(En
la foto el Sensei Takahashi)
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