Pues yo amo la vida como el azaroso fenómeno que es, y me encanta la mujer como parte muy importante de ella. Tolero sin dificultad el sonido del corazón de la hembra que amo. Es más, puedo dormirme escuchándolo latir insistente y cálido. No hay soledad que resista ese himno.
Mi meta es dejarme encontrar y luchar para llegar juntos al templo de la Armonía.
-S.P.
(Pintura de Rob Hefferan)
------------------------------
No hay comentarios:
Publicar un comentario