viernes, 22 de junio de 2007

MIEDOS


Clara Schumann (1819-1896) fue, sin duda alguna, la pianista más importante del siglo XIX. El público europeo la consideraba tan buena como Franz Liszt (1811-1886) o Sigismund Thalberg (1812-1871), otros pianistas virtuosos famosos en aquella época. Fue la esposa de Robert Schumann (1810-1856), uno de los más importantes compositores del Romanticismo alemán. Con Johannes Brahms (1833-1897), otro gran compositor del siglo XIX, cultivó una amistad que duró hasta la muerte. Clara fue admirada por otras personalidades de la época, como Goethe, Mendelssohn, Chopin y Paganini. Además de ser pianista, escribió su propia música y editó muchas obras de su esposo.

Aunque no compuso mucho, las obras que conservamos de Clara tienen gran mérito. Escribió música para piano solo, canciones para voz y piano, música de cámara y obras orquestales. Las razones por las que no se dedicó en mayor grado a la composición, a pesar de su talento evidente, fueron varias, entre ellas su carrera de concertista, sus ocho hijos, la devoción por su esposo y el papel de la mujer en el siglo XIX. Clara tuvo una formación musical privilegiada, lo que junto con su comprensión musical y habilidad le permitía abordar exitosamente la composición. Sin embargo, escribió en su diario:

“Alguna vez creí que tenía talento creativo, pero he renunciado a esta idea; una mujer no debe desear componer. Ninguna ha sido capaz de hacerlo, así que ¿por qué podría esperarlo yo?”




- Jesús Herrera





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2 comentarios:

Anónimo dijo...

Los bonsais del Jardinero: pequeños instantes (1)que deparan grandes momentos (2).
¡Queremos mas bonsais¡

El Club de amigos de los Bonsais de S.P.
Y como soy el Presidente Eternamente Efímero de este Club y solo me presido a mí mismo (no estoy en condiciones ni tampoco deseo presideir nada mas), me puedo permitir y permito una segunda trova en ronda:
Los bonsais literarios de S.P., sutiles resistencias poéticas frente a la masiva presencia (4) de los acontecimientos


1.-Por algo son bonsais (3)
2.-A los buenos catadores.
3.-Que no es lo mismo pequeños bonsais que bonsais pequeños.
4.-De muchas atmósferas anestesiantes.
5,.Por contra, los bonsais son pequeños de duración como las saetas, y como éstas van buscando sin demoras el corazón de los sentidos. (¡Otgche, que aquí hay título: "El corazón de los sentidos")

Anónimo dijo...

¡¡qué risas!! Eres tremendo ¡¡Y qué tino!! Algunos tienen eso que dices: un corazón (o coraza descomunal) en los sentidos. De estos uno gobierna EE.UU.